Ajo de Oso (Allium Ursinum)
El pueblo lo
denomina también ajo silvestre. Es amante de la sombra, crece en praderas
húmedas, en las orillas de riachuelos y en monte bajo umbroso. Es de los
primeros colores verdes de la primavera, propagándose en forma de alfombras
formadas por sus hojas verde claro. Sus hojas se parecen a las de la venenosa
convalaria, y a las del azafrán silvestre que también es venenoso. Este último
saca sus hojas en la primavera, pero no produce flores hasta el otoño. Pero su
fino olor a ajo hace que el ajo de oso sea inconfundible. No antes de finales
de abril o principios de mayo brota a partir del tubérculo de su raíz,
semejante a la del ajo, una hermosa umbela blanca, que corona un tallo esbelto,
parecida a una borla floral redonda. Se nota en el ajo de oso que lleva
dormidas enormes potencias. Existe la leyenda de que los osos, después de su
sueño invernal, también la buscan para limpiarse el estomago, la sangre y los
intestinos. El ajo que se cultiva en nuestros huertos tiene en lo esencial las
mismas características purificadoras de la sangre, sin embargo, el ajo de oso
es más suave y posee mayor fuerza curativa, está indicado para curas
primaverales depuradoras y para mejorar las enfermedades crónicas de la piel. Combate
tanto las diarreas agudas y crónicas, aunque vayan acompañadas de gases y
cólicos, como el estreñimiento, lo mismo que se deba a un espasmo interno como
a una relajación de los intestinos. También ayuda en los trastornos cardíacos o
el insomnio, causado por el estomago, así como las molestias debidas a la arterioesclerosis
o a la tensión alta e la sangre, como mareo, presión en la cabeza y ansiedad. La
tensión de la sangre se normaliza lentamente.
Las hojas recién cogidas
limpian también los riñones, la vejiga y tiene un efecto diurético. Herida de
mala curación se cicatrizan rápidamente untándolas con jugo fresco de Ajo de
oso. Es uno de los mejores
purificantes de la
sangre.
Modos
de preparación
Como
condimento : Las hojas frescas , se emplean para aliñar
sopas, salsas, ensaladas y platos de carne.
Tintura
de Ajo de oso: Se tritura las hojas o los bulbos de
la planta y se llena una botellas, sin
apretar, hasta el gollete. Después se cubre todo con un aguardiente o licor
puro de38-40 º y se deja 15 días al sol. Se toman de 10 a 15 gotas diluidas en
un poco de agua, cuatro veces al día.
Fuente: (Salud de la Botica del Señor de María Trebren)
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